TUMBA DE LA FAMILIA GARZARÁN EN TERUEL, por Elisa Bretón

El lugar de sepultura  actual en el municipio de Teruel es el cementerio situado a las afueras de la ciudad, no siendo este el primer cementerio, ya que está precedido por el ubicado en san Cristóbal. El nuevo cementerio data de 1832, pero por la existencia de una capilla de 1818 podría ser de años anteriores. La tumba más antigua de la que se tiene constancia es del año 1838.  Está dirigido  por el Excmo. Ayuntamiento de Teruel, que regula los tipos de sepultura que puede haber, entre ellos los descomunales panteones. Los panteones  pertenecen a las familias más adineradas como los Ferrán y los Garzarán. Estos últimos eran una  familia de gran importancia  en el siglo XX y que poseían uno de los bancos de esa época.  Se dedicaban  al préstamo de dinero, creación de depósitos y la comercialización de acciones. Fueron muy importantes ya que ellos llevaban a todos los pueblos de la provincia mediante delegaciones (unas 150 delegaciones). El cementerio de Teruel no es un lugar inmenso pero alberga familias con historias curiosas y que marcaron un antes y un después en la historia de la ciudad